Después de la escuela Epau nos llevaron a comer a un restaurante en la playa. Allí, como la comida no estaba lista todavía nos explicaron el ciclo del coco y como se hace la leche de coco a la manera tradicional.
El ciclo del coco:
- Los cocos verdes están en la palmera
- Los cocos maduros caen
- Dentro del coco empieza a formarse la “manzana” de coco. (Nos la dieron a probar y es muy mantecosa).
- A través de uno de los tres ojuelos del coco empieza a crecer la palmera.
- En seis o siete años la palmera ya da frutos.
También nos contaron como he dicho, como se hace la leche de coco:
- Primero hay que pelar el exterior grandote del coco. Normalmente se usa un palo clavado en el suelo y afilado en la punta con forma de bisel y se van haciendo gajos.
- El coco (tal y como estamos acostumbrados a verlo en occidente, marrón y pelosillo, se parte.
- Se vacía la carne con una cuchilla de metal que asoma por la parte delantera del taburete donde se sienta el “operario”. Si es hombre lo hace con las piernas abiertas, si es mujer, lo hace de lado, “a la amazona”.
- Se pone la pulpa del coco entre la paja de la cáscara, de tal manera que la paja funcione como filtro, y se prensa con las manos para sacar la leche.
Y bueno, esto es todo. Nos dieron a probar la leche recién exprimida y estaba riquísma.
Con estas explicaciones llegó la hora de comer. La comida no estuvo mal y hasta pudimos repetir. Había: arroz, lap-lap, calabaza frita, patatas dulces con zanahoria, estofado de ternera, ensalada, pollo en salsa, brochetas (lo mejor) y un vegetal que no identifiqué.
Un grupo amenizó la comida con música y el chico que tocaba el ukelele, de unos 12 o 13 años, me lo prestó para que les acompañara en una canción. Pero lo más interesante del grupo era el “contrabajo”: una gran caja vacía con una piel en la parte superior, y en el centro una cuerda que iba hasta un palo que se apoyaba en la esquina. Con el palo se hacía un movimiento de palanca, apoyado en la esquina, y según la inclinación de conseguía una nota u otra. El grupo, eso sí, solo sabía dos canciones y fue un poco repetitivo.
Alrededor de la zona del restaurante dimos un paseo y nos acercamos a la costa rocosa para ver la islita de enfrente.
Finalmente, para terminar esta entrada quisiera comentar que después del ciclón Pam llegó mucha ayuda económica internacional pero después de que llegara la primera cosecha posterior al desastre, esta había parado casi por completo.