Muralla (Foto de Angel, el Alfa III)
El 28 de diciembre tuve la ocasión de visitar Ávila, y a pesar de que me encontraba mal y estaba cansado debido a una gastroenteritis vírica, disfruté de la visita ya que Ávila es una ciudad llena de encanto. Disfruté de sus murallas, por supuesto, aunque no subí a ellas, pero también de la visita a su Catedral, del callejeo por el casco antiguo, del ambiente relajadamente navideño y familiar y de un día soleado de invierno, de esos de increíble cielo azul. Continue reading