La tercera parada del Tour Efate fue en una escuela de, si no me equivoco, Epao. Allí, los niños y niñas nos cantaron unas canciones al estilo coral infantil, con sus voces chillonas. Fue un espectáculo curioso. La verdad es que no sé cómo clasificarlo, pero los niños parecía que se lo pasaban muy bien y después del concierto se fueron a jugar y a hacer sus cosas de niños. Continue reading →

La segunda parada del tour Efate fue la turistada del día: los guerreros ni-Van. Se trata de… no sé cómo explicarlo de manera que haga justicia a la experiencia. Primero, y desde que salimos del Blue Lagoon de Eton, el conductor nos fue “sugestionando” con poco éxito acerca de la “peligrosa” visita que íbamos a hacer a un poblado ni-Van, que podía acabar con nuestros serranos cuerpos en la barriga de los feroces caníbales de Vanuatu. Continue reading →

El segundo día en Efate, hicimos el tour de un día por la isla que habíamos contratado el día anterior. Por cierto, nos costó 6000 VT (48,59€) por pasajero ¡después de una ardua negociación! En general, nos gustó y fue interesante aunque en algunos momentos era un poco “turistada” si bien yo tengo una opinión particular al respecto, condicionada por el hecho de haber actuado muchas veces para turistas en España.  Continue reading →

Una vez instalados en el motel de Port Vila, tomamos el autobús para ir al centro de la ciudad y hacer algo de turismo con el que aprovechar el día. Al bajar nos acercamos a las paradas de water-taxies, desde donde se ve muy bien Iririki Island, la isla-resort que está a unos 200 metros del muelle. Allí nos confirmaron que la isla estaba cerrada desde que pasó el ciclón Pam. Uno de los taxistas que había nos ofreció un tour de una hora en water-taxi por 3500 VT (28,46€), pero ni hablar. El ferry, por su parte, nos pareció que no estaba de servicio. Continue reading →

Llegaron las últimas horas en Santo, que es lo que más nos había gustado de momento en el viaje. Esa mañana después de levantarnos y desayunar, hicimos las mochilas y las dejamos en recepción. Salimos a dar un mini paseo bajo el solazo que hacía, y a hacer un par de fotos del ayuntamiento con los iPhone.  Justo enfrente había una tienda y Amaya me preguntó si quería entrar. La verdad es que yo pensaba que habría lo mismo que en todas las otras, pero el día antes ya había encontrado un parche para la capa por casualidad, así que, para dentro. Continue reading →