Lìjiāng es más bonito que Dàlǐ pero está tan masificado y es tan turístico que por momentos se padece el síndrome del parque temático. Quizá le falte autenticidad, al ser todas las tiendas de souvenirs y de tonterías varias, agencias de viajes o locales para tomar algo o comer. Creo que en total sólo habrá siete tipos de local distinto que se repiten y repiten y repiten… A pesar de todo esto, la ciudad tiene mucho encanto, incluso bajo la lluvia. Continue reading